martes, 11 de junio de 2013

Secretario de Seguridad del Estado y tres agentes golpean a periodista 
 
Evalúa denunciar al funcionario ante el Ministerio Público. Pedirá protección ante la CIDH
 
Deivis Eliecer Cerrud

Alejandro Garúz viceministro y secretario del Consejo de Seguridad del Estado
Panamá. El secretario general del Sindicato de Periodistas de Panamá, Filemón Medina, evaluará este miércoles con sus abogados presentar una querella penal ante el Ministerio Público contra el viceministro Alejandro Garuz, secretario del Consejo de Seguridad del Estado, por las agresiones físicas que sufrió y probablemente extralimitación de funciones.

En una entrevista con LaEstrella.com.pa, Medina contó que se acercó al punto donde estaba retenida la periodista de TVN, Elizabeth González y el camarógrafo Bolívar Jurado, en una esquina del Cerro Ancón cerca del área de Quarry Hights, sitio donde se encuentran las oficinas del Consejo de Seguridad del Estado.

Como dirigente sindical buscaba una salida mediadora al incidente, pero al estacionar su automóvil fuera del área, un agente del SPI le pide identificación y le recuerda las causales de cárcel por filmar un área restringida.

"Ellos estaban a orilla de calle, no estaban dentro de un área restringida", comprobó Medina y explicó que ellos no filmaron nada.

Paso a paso, el periodista explica que tras la retención de los comunicadores se apersona al lugar el propio viceministro Garuz y él saca su teléfono celular para grabar el hecho. Lo hacía debido a que "las autoridades de este país dicen una cosa, a los 30 segundos dicen que eso no fue así".

En aras de tener un registro fidedigno, como él mismo relata, procedió a sacar su celular, sin embargo, una unidad se le acerca y le pregunta: ¿estás grabando?. Él responde afirmativamente y le agrega lo hace para tener un registro de la conversación.

Luego, el viceministro reaccionó enseguida al ser comunicado por el agente de que se grababa. "Y el señor Garuz en una forma totalmente violenta, se viene hacia mí, me agarra por la solapa del abrigo y me estrella (la cara) contra la capota de la tapa del carro de TVN, en tres ocasiones", denunció.

Acto seguido, al secretario general del Sindicato de Periodistas de Panamá otras tres unidades lo agarraron y lo "estrellaron con más fuerza" al vehículo. Eran ya 4 personas.

Los agentes le torcieron los brazos contra la espalda para quitarle el celular.

En la desesperación, Medina narró que vio a una de las unidades posar sus manos sobre el arma de reglamento, en ese momento, otra le tuerce más el brazo en la espalda y así logran arrebatarle el celular.

En la entrevista, dejó claro que no hizo una acción de fuerza, pero no abandonó una duda: "si yo hubiese hecho una acción de mayor resistencia, yo creo que tal vez esa unidad que posó su mano sobre el arma me hubiese disparado".

"Porque a esos niveles de intolerancia hemos llegado", continuó.

El dirigente periodístico reclamó ante Garuz la agresión física y apeló por el derecho de grabar para que no se mienta más tarde de los hechos con los comunicadores.

Entonces, según Medina, Garuz dijo: "yo reacciono violentamente cuando me están grabando".

El incidente fue su boleto para quedar retenido junto a González y el camarógrafo. Lamentó que inmediatamente quedó privado de su libertad, sin su celular y la única persona que daba órdenes era Garuz, a quien no le reconoce potestad para retener a una persona.

Los agentes trataron de revisar el celular, pero no pudieron debido a que tiene contraseña personal. Incluso le pidieron que les diera la contraseña para revisar qué grabó.

Garuz le ofreció disculpas dos veces, conversaron, a pesar de eso criticó: "no es correcto ir agrediendo a cualquier ciudadano en este país, porque a tí te da la gana".

Aún con sus golpes y mal rato pasado, el secretario del Sindicato de Periodistas de Panamá buscará una medida cautelar de protección que cobija a los periodistas ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) aduciendo que la política se pone violenta a medida que se acercan las elecciones. La CIDH queda en Washington, Estados Unidos.

"Yo tengo que evaluar con los abogados la figura jurídica que se puede emplear para reclamar en los tribunales nuestro derecho por la forma tan violenta y absurda de la que fuimos tratados por el señor Alejandro Garuz”, concluyó.

Ni el Ministerio de Seguridad Pública ni el Consejo de Seguridad del Estado han emitido comentario alguno.

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