Chofer de Velocci es directivo de Svemark

NICANOR ALVARADO DIXON

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El taxista que acusa en Panamá al testigo clave de la Fiscalía Italiana figura en la empresa que iba a construir las cárceles modulares

 

LOS GIROS DEL ‘AFFAIR’ LAVITOLA

PANAMÁ. La historia detrás de Antonio Santoya, el supuesto chofer de Mauro Velocci en Panamá, va más allá de las carreras que dice haberle hecho al italiano por quince meses al Ministerio de Gobierno, a cuajar su negocio de construcción de cárceles modulares por 176 millones de dólares.

Según datos del Registro Público, Santoya es secretario ‘ad hoc’ de Svemark, la compañía que Velocci presidía y a la que Roxana Méndez estudiaba darle la concesión millonaria de las cárceles. Fue su mano derecha.

Ese fue un dato que el chofer obvió en una entrevista con el diario Panamá América. Lo mismo ocurrió con la supuesta traductora de Velocci, Fabiana Querini.

En la publicación, Santoya dijo haberle prestado al italiano mil 500 dólares y lo acusó de consumir drogas. El presidente Ricardo Martinelli hizo lo mismo.

Velocci reveló a la Fiscalía de Nápoles el cercano vínculo entre Martinelli y Valter Lavitola. Los jueces investigan si el presidente habría recibido sobornos.