sábado, 3 de noviembre de 2012

Fiscales italianos hablan de ´modalidad criminal´

El expresidente de la empresa Impregilo –que participa en obras del Canal– asegura que Valter Lavítola intercedió por el mandatario panameño
 
Santiago Cumbrera   
 
 

El ex primer ministro de Italia Silvio Berlusconi prometió en 2010 a Panamá la construcción de hospital pediátrico en Veraguas, pero la obra no se concretó.

Las últimas noticias surgidas en Italia, en relación con las investigaciones que realizan fiscales napolitanos al conglomerado Finmeccanica, revelan las declaraciones de Massimo Ponzellini, expresidente de la empresa Impregilo, integrante del consorcio Grupo Unidos por el Canal, S.A. que realiza los trabajos de ampliación del Canal.
Ponzellini confirmó a los fiscales Henry John Woodcock, Vincent Piscitelli y Francesco Curcio que recibió presiones del ex primer ministro italiano Silvio Berlusconi y de Valter Lavítola –pieza clave en la millonaria contratación entre Finmeccanica y el Gobierno de Panamá– para que donara un hospital a Panamá.
En el interrogatorio se hizo alusión a una llamada interceptada en abril de 2011 entre Berlusconi y Ponzellini, en la que el ex primer ministro de Italia le dice que “se debe llegar a un acuerdo con Panamá en relación con los hospitales, o el presidente [Ricardo Martinelli] emitirá un comunicado de manera de bloquear el trabajo de Impregilo en el Canal produciendo así una grave quiebra y crisis”.
Ya en agosto pasado, los fiscales dieron a conocer la transcripción de esa llamada en la que Ponzellini –investigado en Italia por corrupción, fraude fiscal y blanqueo de capitales– le respondió a Berlusconi que intervendría inmediatamente.
“Entraron en juego Lavítola y Martinelli con sus pretensiones, o más bien, Lavítola como intermediario de las pretensiones del presidente Martinelli”, declaró Ponzellini a los fiscales, según publicó ayer el diario italiano especializado en temas económicos, Il Sole 24 Ore.
“Lavítola nos hizo entender claramente que el presidente Martinelli, a fin de adjudicar dicho contrato a Impregilo, exigió un reconocimiento económico para él y su séquito, dando a entender que pondría obstáculos y problemas para Impregilo en caso de que no cediésemos a su pretensiones”, aseguró Ponzellini.
Según el diario italiano, Ponzellini también explicó a los fiscales napolitanos que “Impregilo participó en la licitación del Metro de Panamá, sin embargo, la empresa de construcción no estaba particularmente interesada, tanto es así que hizo una oferta altísima”.
Aunque Ponzellini negó que Impregilo aspirara a ser beneficiada con las obras del Metro de Panamá, en septiembre de 2009 (cuando el presidente Martinelli hizo su primera visita a Italia), representantes de la empresa dejaron en evidencia su interés de ampliar sus inversiones en Panamá en proyectos como el Metro y la construcción de nuevos centros penales.
Incluso, el día en que se abrieron los sobres para la selección de la empresa que construiría el Metro capitalino, los empresarios italianos salieron con cara de disgusto del salón, al escuchar que las empresas seleccionadas fueron la española FCC y la brasileña Odebrecht.
SUPUESTA CORRUPTELA
Por su parte, la televisora italiana Canal 7 (que también recoge en su sitio web el interrogatorio de Ponzellini) recordó que el presidente Martinelli se había quejado ante Lavítola por no haber recibido el dinero para la construcción de un hospital, y amenazó con represalias.
Frente a estos elementos, la Fiscalía de Nápoles describió lo sucedido como “la aplicación de una práctica arraigada y muchas veces experimentada... una modalidad criminal”.
Los fiscales también identifican a Lavítola como el "corruptor" y a Martinelli como el "corrupto".
DE HOSPITALES Y MÁS
En su edición del 23 de agosto de 2012, La Prensa dio a conocer que cinco meses después de la llamada interceptada entre Berlusconi y Ponzellini, el secretario privado de Martinelli, Adolfo De Obarrio, le escribió un correo electrónico a Lavítola solicitándole la confirmación sobre la construcción del hospital Luis Chicho Fábrega, en Veraguas.
Justamente un año antes (agosto de 2011) el entonces embajador de Italia en Panamá, Giancarlo Curcio, le escribe a funcionarios de Palacio Chigi informándoles de una llamada que le hiciera el presidente Martinelli, en l que evidenció su gran molestia -"furia" es la palabra que usa el embajador - porque Berlusconi no había cumplido una supuesta promesa de donar un hospital a Panamá.
Finmeccanica niega ´tangenti´
El presidente de Finmeccanica, Giuseppe Orsi, pasó hoy al contraataque.
A través de su abogado afirmó que, por el momento, la justicia italiana “no ha comprobado esos pagos [presuntos sobornos pagados en Panamá] para obtener favores en la licitación de las obras públicas”.
El abogado de Orsi, Ennio Amodio, hizo estas declaraciones el mismo día en que un Tribunal de Nápoles negó el pedido planteado por el director comercial de Finmeccanica, Paolo Pozzessere, de salir de la cárcel.
El "no" de la justicia a ese pedido confirmaría - afirman fuentes independientes - que las acusaciones de los fiscales son confiables.
Pozzessere, que se encuentra en una prisión de Nápoles precisamente por el tema de los presuntos sobornos en Panamá, es un hombre de confianza de Orsi, que tiempo atrás lo nombró "senior advisor" para los negocios del grupo en Rusia.
Orsi –al que diversos sectores le han solicitado la renuncia– está siendo investigado por la Fiscalía de Milán por corrupción internacional y financiación ilícita a los partidos.
Hoy volvió a defender, a través de Amodio, su posición también en relación a presuntos pagos hechos por el grupo Finmeccanica en la India.
La empresa AgustaWestland también desmintió el pago de comisiones o tangenti (sobornos) por la operación de la venta de helicópteros en Panamá. “No hubo comisiones y mucho menos tangenti, afirmó la empresa, que “descartó categóricamente la admisión, por parte de un dirigente de la sociedad, del pago de las comisiones”.
Es, en cambio, cierto –indicó la misma empresa– que AgustaWestland “firmó con Agaphia” (la sociedad que según la Fiscalía de Nápoles hizo “transitar” los presuntos sobornos a través de Valter Lavítola) “un contrato del que no ha salido ningún tipo de pago”.

Rigacci Martino
Ansa

No hay comentarios.:

Publicar un comentario